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Todo sobre la agricultura de regadío

Todo sobre la agricultura de regadío

No es un secreto que depender del clima para el cultivo de algunas plantas, no siempre es un método viable. Lo sabemos nosotros ahora, igual que lo sabían nuestros antepasados en los tiempos antiguos. Está claro que a veces el agua que nos da la lluvia no va a ser suficiente y que echarle una cantidad mayor, va a mejorar nuestras cosechas. Aquí es donde aparece el término de agricultura de regadío. Desde Lama Store os contamos todo lo que necesitáis saber sobre este método de cultivo.

¿Qué es la Agricultura de Regadío?

La agricultura de regadío por definición es un método que consiste en suministrar agua a los cultivos a través de diferentes sistemas artificiales de riego. Es el método más utilizado tanto por grandes como pequeñas empresas del sector primario. Nos permite un cultivo mucho más eficaz, ya que no vamos a depender de la lluvia para el riego y vamos a poder tener un control sobre la cantidad del agua que necesita cada planta.

La inversión en este tipo de agricultura suele ser bastante mayor que en otros tipos, ya que requiere tener una infraestructura especial. Necesitaremos no sólo dispositivos de riego automático, sino también un sistema de filtración de agua, como los filtros de arena o filtros de anillas. También tendremos que pensar en su mantenimiento, por lo que vamos a tener que hacer revisiones periódicas por si necesitamos recambios o accesorios. Y por supuesto, el uso del agua es bastante mayor que en el caso de la agricultura de secano. Sin embargo, estamos hablando de inversión y no de gastos, ya que la producción con regadío intensivo es mucho mayor que en otras metodologías, por lo que merece la pena utilizar este sistema.

Tipos de Regadío que Existen

Dependiendo de las necesidades de cada planta y de los recursos de los que dispongamos, podemos optar por diferentes tipos de sistemas de regadíos. Os presentamos los más comunes:

  • Por inundación o sumersión. Es el método de riego intensivo más utilizado. Está presente en muchos casos de agricultura de regadío. Consiste en inundación completa de una parcela sin posibilidad de desagüe. Es un método más común principalmente en el cultivo de arroz.
  • Riego por surcos. Es un método bastante común y se utiliza en terrenos ondulados donde en la parte de arriba se encuentra el cultivo y se introduce el agua en los canales creados.
  • Riego por drenaje. Se utiliza para eliminar los excesos de agua acumulada para ofrecer a los cultivos las condiciones más óptimas para su desarrollo. Es un método muy eficiente, pero que requiere de una infraestructura particular.
  • Por aspersión. En este sistema el agua llega a los aspersores a través de las tuberías y se proporciona el agua a los cultivos de forma localizada imitando la lluvia.
  • Riego por goteo. Es un método de riego localizado que suministra el agua a los cultivos en forma de gotas. Es el método más eficiente en cuanto al uso del agua.

Diferencia entre Cultivo de Secano y de Regadío

Si ya tenemos claro que el cultivo de regadío es el que requiere unos sistemas de riego artificiales como canales o aspersores, ver diferencia entre el cultivo de secano va a ser muy fácil. Son metodologías opuestas, ya que el cultivo de secano trata de riego de forma natural, aprovechando el agua de la lluvia. Es mucho más barato, ya que, aparte de no consumir agua adicional, no requiere tener una infraestructura muy avanzada. Sin embargo, nos limitamos a cultivar sólo durante algunas épocas del año y corremos riesgo en el caso de sequías. Además, sólo nos sirve para algunos tipos de cultivos, como la vid o el olivo, los que también pueden ser cultivados con la agricultura de regadío aumentando de esta manera su producción. Es por estos motivos por los que la agricultura de secano es cada vez menos habitual en el sector primario.

Ejemplos de Cultivos de Regadío

Los cultivos de regadío están expandidos mundialmente, pero sobre todo son comunes en zonas calurosas donde no hay mucha lluvia, por lo que la agricultura de secano no es una opción. Antes de empezar a trabajar con este tipo de cultivo es importante conocer las necesidades de las especias: cuánta agua necesitan o que suelo requieren. De esta manera vamos a poder obtener resultados mucho más óptimos. Entre los cultivos más populares en los que se utiliza el sistema de regadío tenemos el arroz, vid, frutales u hortalizas. En España los más populares son la cebada, remolacha, centeno, maíz, patatas, tomate, cebolla, y por supuesto, almendro y olivo.

Cultivo del Almendro en Regadío

Aunque en el caso del almendro es habitual tanto la agricultura de secano como la de regadío, no es una duda que en el segundo caso la productividad es mucho mayor. Se calcula que, con un riego intenso, podemos obtener una cantidad por una hectárea de hasta 30 veces más que en el caso de secano.

¿Qué debemos tener en cuenta a la hora del cultivo del almendro?

  • Cuanta más agua, más producción hasta llegar a un nivel de agua óptimo.
  • El mejor método de riego para este tipo de plantas es el riego por goteo. Deberíamos usar un sistema con un caudal de unos 2l/h y separación de unos 60cm. Lo habitual es durante el primer año poner una fila de tuberías a un lado del árbol y añadir otra fila por el otro lado al año siguiente. Para su mejor funcionamiento deberíamos contar también con un sistema de filtración. Para este tipo de riego lo mejor es usar un filtro de malla o un filtro de anillas.
  • La época en la que más atención le tendremos que poner es la primavera.
  • El riego justo después de la cosecha será la clave para una mejor producción en la temporada siguiente.
  • Es mejor cultivarlo en un suelo arenoso y suelto.
  • Requiere de media unos 3000m3/ha de agua.

Olivos de Regadío

El cultivo del olivo es uno de los más característicos en España. Aunque en un árbol que en realidad no requiere mucha agua para la producción y puede aguantar la sequía sin ningún problema, su producción aumenta considerablemente cuando utilizamos el regadío intensivo.

¿Qué debemos saber sobre el regadío del olivo?

  • La época en la que más agua va a necesitar es entre la prefloración y la maduración.
  • El mejor sistema de riego es el riego por goteo, aunque también podemos utilizar una manguera para un riego localizado. Bajo ningún concepto deberíamos usar los aspersores, ya que esto podría provocar la aparición de los hongos.
  • Para la filtración de agua deberíamos optar por filtros de anillas o de malla.
  • La cantidad del agua hay que calcularla según el tipo de suelo, la producción que se espera obtener, el área foliar y la cantidad de lluvia.

Si tienes alguna duda acerca de la agricultura de regadío o si quieres compartir tus conocimientos con nosotros, no dudes en dejarnos un comentario. Desde Lama, nos encantará poder ayudarte y conocer tu experiencia con este tema.

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